Letra y música: Manuel Domínguez.
Arreglos: José Manuel Melendo
El gran Newton, citando una frase que venía
rodando desde el siglo XII para explicar que los logros
de una generación –o de un persona- se
basan siempre en los de las que la precedieron, escribió
“Si he visto más lejos, es porque estoy
sentado sobre los hombros de gigantes.” Todos
somos enanos a hombros de gigantes. ¡Quién
volviera a serlo a hombros de su abuelo! ¡Quién
pudiera volver a llevar un niño a las espaldas
–a culecas, a corderetas, o mejor aún sobre
los hombros!- y enseñarle a mirar –sólo
y siempre- un poquito más allá.
A él no le bastaron tres hijas y dos nietas.
Se echó a la espalda un país.