En los pueblos de Lanaja
había una señorita,
hija de Antonio el Moreno,
que se llama Agustinica,
hija de Antonio el Moreno,
que se llama Agustinica.
La Agustina cayó en cama
sin ninguna enfermedad,
que la mataron sus padres
por no dejarla casar,
que la mataron sus padres
por no dejarla casar.
-¡Ay, padre, que estoy muy mala,
ay, que me voy a morir!
Dígale al novio que suba
y se despida de mí.
Dígale al novio que suba
y se despida de mí.
Y el padre le respondió
con palabritas muy bastas:
-¡Aunque mil veces te mueras,
tu novio no entrará en casa!
¡Aunque mil veces te mueras,
tu novio no entrará en casa!
La caja ya va delante
y el cortejo va detrás,
y el criminal de su padre
liando un cigarro va,
y el criminal de su padre
liando un cigarro va.
-Adiós, Agustina, adiós,
en el cielo nos veremos
ya que en la tierra tus padres
no quieren que nos casemos,
ya que en la tierra tus padres
no quieren que nos casemos.
Letra y música: Popular |